Morena va por Alito porque le teme al PRI

Morena no va solo contra un dirigente, va contra el único partido que ha denunciado el pacto del gobierno con el narco.

Lo que está ocurriendo con Alejandro Moreno no es sólo un pleito personal. También es un ataque directo contra el PRI, contra su historia, contra su liderazgo actual y contra su papel como única oposición real en el país.

Desde el gobierno se ha desatado una campaña para golpear al dirigente nacional del PRI con acusaciones sin sustento y con el uso descarado de fiscalías como herramientas de intimidación. Pero lo que les molesta no es el hombre: es lo que representa. Alito ha sido uno de los pocos que ha denunciado de frente el narcopacto, los abrazos al crimen y la militarización disfrazada de estrategia.

Por eso hoy más que nunca, el PRI esta fuerte, ha sabido cerrar filas y el oficialismo lo sabe, por eso le teme. La unidad para el PRI no es opción, es y ha sido la forma de hacer frente al autoritarismo que pretende apoderarse del país. Y no solo en defensa de un liderazgo, sino en defensa del partido, de su militancia, de las y los mexicanos, y de todas las personas que creen en un México democrático.

Alito Moreno no está solo. Lo respaldan los miles de priistas que saben que este ataque es parte de una estrategia mayor: eliminar cualquier contrapeso para controlar el país a la fuerza. Pero el PRI no se arrodilla. Hoy, con unidad, responde más fuerte que nunca.